Cuando quiere mostrarle al abogado le viene el irresistible deseo de arrodillarse y deslizarlo en su boca. Capri es dueña de una agencia de modelos ay ha sido demandada por uno de sus modelos por acoso, para esto recurre al prestigioso Sr. Castle, quien no tardará en descubrir que es culpable, pero es secreto profesional y no podrá decir nada.
Ella le pide que colabore con el fin de hacer una ilustración de lo sucedido, pero cuando apoyó la mano sobre el bulto del abogado, esa mujer que en apariencia estaba libre de culpas, deja salir la verdad al ponerse cachonda pidiendo permiso para inclinarse entre las piernas con el propósito de un oral.
Encantado de ayudarla no tarda en decir, prosiga. Cabello suave y liso sigue los movimientos, él los corre a un lado para poder mirar a esa belleza sin nada que se interponga. Luego saca a la luz tetas cachondas en evidente estado de excitación que será de inmediato interpelado por el profesional que le hace apoyar manos en la mesa para devolver lo recibido.
Sin terminar de quitarle la ropa hará uso del martillo de la justicia comenzando una oleada de sacudones propinando el placer que ella buscaba. Es tan movido todo que deben desnudarse, sentado en la silla le sostiene la cintura mientras ella sujeta el duro palo para acomodarlo en ajustado chocho.
Pasarán a hacer cucharita sobre el escritorio donde el magistrado ya no buscará cambiar, pues de esta forma conseguirá lanzar su veredicto directo al rostro y pechos de la demandada.
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