Lidiando con la Hija Putona Del Patrón

El padre de Adira ha traído a trabajar a su casa a una de las promesas de la empresa, Oliver, quien no tarda en ser objeto del deseo de la rubia que comenzará una oleada de desafiantes invitaciones a relajarse dentro de su coño. Es sin dudas hermosa, recibe propuestas cada día gracias a su belleza en cuerpo, rostro y cabello, sin embargo disfruta mas cuando el riesgo forma parte de la acción. Apoyada en la pared vestida para su clase de tenis empieza a hacer esas miradas que incomodan al aprendiz. Al regreso va directo a la oficina para lanzar otro ataque, parada delante del escritorio sube la corta falda para quitarse la tanga delante del sorprendido pelirrojo que queda mudo cuando le arroja la ropa interior directo hacia él.
Mirada antes de retirarse asegura que se anime a seguir sus pasos, nada tarda en ponerse lencería roja para esperarlo recostada en un sofá con la mano entre las piernas. Con suave voz comienza a invitarlo a tirarse justo en el lugar que los dedos juegan, esos arrugados labios vaginales resultarán tan bellos como irresistibles. Luego lo hará recostar para saber si su intuición no le mintió, desprende el pantalón y descubre que todo es como ella imaginaba, grande, duro y listo para que pueda salivar a gusto.
Endurecido con las venas a punto de explotar sujetará la cintura de Adira que se montó de reversa, los sonidos alertan que allí debajo se producirá en cualquier momento un orgasmo explosivo, el flap flap domina, de frente se derrite pero será en cuatro cuando pueda meterla completa hasta que los testículos dicen basta que no oculta quien es soltando chorros de orina acompañados de gritos retumbantes que mas calientan a Oliver. Empezará a desafiarlo nuevamente, guarrada tras guarrada reclamando que le deje el coño con todo lo que tenga en la verga.